¡Hola a tod@s!
Sentimos la necesidad de contaros algo acerca de cómo nos van las cosas. Hace semanas que no escribimos. Y no es que paremos es que no ha habido mucho tiempo, y desde que no tenemos Internet en el local esto de ampliar nuestra «huella digital» se hace más complicado.
Seguimos con el 9121, metidos de lleno en la instalación eléctrica. Tenemos renovado gran parte del cableado de alumbrado interior y el de focos y señales. También estamos aprovechando para reemplazar el tubo corrugado metálico que se empleaba para canalizar el cableado allí donde se ha deteriorado notablemente y estamos estudiando el reemplazar el convertidor 24 V C.C. /125 V C.A por uno a 220V C.A para que los enchufes que lleva el automotor puedan ser útiles hoy en día.
Queda poquito en este apartado, después llegará el momento de meter baterías y comprobar su correcto funcionamiento renovando magnetotérmicos y verificando la funcionalidad de la instalación. Y continuamos documentando todo con esquemas y planos para que en lo venidero no haya que jugar a los adivinos con el multímetro para saber cómo están hechas las cosas. Y así tenemos pensado hacer con cada uno de los circuitos del vehículo.
Parte de la instalación de alumbrado
Verificación de la instalación del refrigerante
Entre tanto ya tenemos unas cuantas abrazaderas para completar la instalación de la refrigeración. De momento no tenemos todas las necesarias, pero sí las suficientes para empezar a trabajar en la instalación e ir reemplazando los manguitos dañados. Además, se han inspeccionado todos los tramos del circuito, siguiéndolo tubo a tubo para ver analizar su funcionamiento. Con el embrague estamos a la espera de encontrar el collarín para instalarlo, estamos trabajando para que sea pronto.
Hemos encontrado algunos tubos sin servicio que todo apunta quedaron así tras las sucesivas reformas que sufrió el antiguo Zaragoza mientras prestó servicio.
Entre tanto también nos hemos puesto con los accionamientos de las ventanas. En su día los engrasamos pero eso no era suficiente, la grasa y suciedad acumulada de tantos años hacía que la nueva añadida fuera de poca utilidad. Así que, ventana a ventana, se están desmontando los accionamientos. Se limpian pieza a pieza por separado en nuestra máquina de lavado. Posteriormente se revisa a mano y eliminan los restos de grasa adheridos y se vuelve a montar todo comprobando el correcto funcionamiento de cada elemento.
Además se están limpiando también los carriles por donde se desplaza la propia ventana retirando gran cantidad de suciedad acumulada que endurece frena considerablemente el movimiento de la misma, ya llevamos un par de ellas y la mejora ha sido cosinderable.
Poco más que recordemos ahora mismo. Que mañana sábado volveremos por allí para seguir con la tarea aunque tengamos que ir en canoa.
Saludos y feliz fin de semana.