¡Hola amigos! Ya que ninguno de mis compis de asociación se han puesto a actualizar el blog, voy a hacer un pequeño «update» de las últimas semanas. El diseño del blog, como habréis podido comprobar, ha cambiado sustancialmente dándole un aspecto mas moderno y con numerosos enlaces a las nuevas «redes sociales» donde estamos presentes. El diseño no es aún definitivo, puesto que queda ampliar un poco el área de escritura, que se ha quedado un poco pequeño, pero todo será cuestión de que nuestro informático le dé un poco al lenguaje HTML y lo apañe.
Dejando de lado el mundo virtual, vamos a dar un repaso a las últimas novedades en lo que a trenes reales se refiere. Los trabajos mecánicos en el automotor 9121 siguen su curso, aunque siempre hay que dejar alguna cosilla parada, bien por falta de recambios, bien porque los recambios tardan mucho en llegar, o porque, siendo un aparato tan antiguo, es habitual que cuando aprietas un tornillo, se afloje otro, o que si le arreglas una fuga aquí, le sale otra por allí. Así que, hasta que se va «enderezando» la cosa, van pasando jornadas y jornadas, pero ahí seguimos.
Ahora, otro de los «retos» a los que nos enfrentamos, es conseguir el recambio, o la reparación, o alguna pieza nueva para el conjunto del embrague del automotor. Y es que, aunque el disco sea de fácil solución, remplazando los ferodos o buscando uno nuevo, el problema viene tanto con el empujador como con la maza, que posiblemente fruto de las embestidas descontroladas de un sistema neumático artesano y sin regulación alguna, y durante tantos años, han terminado por destrozar ambos.
Maza del embrague del motor Barreiros tal y como lo desmontamos
Y como de embragues anda la cosa, un problema de embrague es el que tiene la pequeña «meme». Pero no un problema en el embrague entre el motor y la transmisión, ya que se reparó por completo y, dicho sea de paso, quedó fenomenal. Se trata de uno de los embragues del sistema «Wilson» de la caja de cambios, que permite la inversión de marcha de la locomotora.
¿Wilson? ¿Más embragues? Seguro que mas de uno está flipando en colores. Por ello os hemos traído este interesante y moderno vídeo explicativo donde podéis conocer, tanto cómo funciona el embrague hidráulico como el que monta la «meme» (minuto 3:00), así como el sistema «Wilson» (minuto 5:25).
Como habéis podido ver, en las cajas de cambio con sistema Wilson, los engranajes están siempre engranados, a diferencia de una caja de cambios convencional, en la que se desplazan distintos engranajes acoplándolos a distintas relaciones de transmisión. Así, en el sistema Wilson, el movimiento se empieza a transmitir cuando la corona dentada exterior se bloquea, bien mediante un mecanismo electromagnéticos, por aire comprimido, o como en el caso de la «meme», de manera hidráulica.
Y es, alguno de esos mecanismos hidráulicos de bloqueo, lo que impide que la pequeña «meme» haga la inversión de marcha. Y reparar ésto es algo que, evidentemente, en el Museo, no podemos hacer, dado que es necesario desmontar media máquina para acceder a la caja de cambios. Por eso, estamos gestionando su traslado a talleres para poder acometer la reparación en una instalación apropiada donde podamos tocar desde arriba, desde abajo, desmontar con un puente grúa, o subir la locomotora con un gato si hiciera falta.
En definitiva, como podéis ver, no paramos, nos enfrentamos a nuevos retos, nuevas reparaciones, cada vez mas complejas, pero no por ello con menos ilusión: seguimos caminando hacia adelante y no pararemos hasta culminar con nuestros objetivos.